Los beneficios del agua de mar a lo largo de la historia
El agua de mar ha sido muy valorada a lo largo de la historia provocando grandes mejoras a nivel médico. Ya Hipócrates recomendaba el agua marina porque “ahuyentaba el dolor lumbar y las piernas cansadas”. De hecho, el conocido término SPA proviene del latín Salus Per Aquam.
En 1899, en Francia, el Dr. Bagot indicó la “balneoterapia”, es decir, una alternancia de baños fríos y calientes de agua de mar y el uso de las duchas de chorro para masajear las zonas afectadas por el dolor. También recomendó por primera vez los baños de agua de mar para tratar las afecciones reumáticas.
Composición del agua del mar
El agua de mar tiene una composición muy similar al de nuestro propio plasma sanguíneo. Contiene sales minerales, vitaminas y oligoelementos beneficiosos para múltiples afecciones de la piel.
El agua de mar fresca está viva y algunos de sus componentes no mantienen sus propiedades más allá de 24-48 horas. Muchos estudios sobre los beneficios del agua de mar se realizan con las aguas hipersalinas del Mar Muerto debido a sus propias características especiales.
Se ha demostrado que los beneficios del agua de mar para la piel son variados y la convierten en un producto ideal para usar en cosmética.
De todo esto se deriva la conocida talasoterapia que recoge las múltiples propiedades beneficiosas del mar como la cura con agua, el clima, luz y calor del sol.
Propiedades del agua de mar
- Propiedades antisépticas y antiinflamatorias. Por eso ayuda a curar y cicatrizar pequeñas heridas, mejora el acné y reduce la inflamación provocada por dermatitis, rosácea, psoriasis y eczema.
- Propiedades exfoliantes que contribuyen a mantener la piel limpia y libre de toxinas gracias a la sal del agua marina.
- Propiedades nutritivas: favorece la nutrición de la piel por su alto contenido en minerales, como el magnesio.
Agua de mar y dermatitis atópica
La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria cutánea crónica que cursa en brotes. Se caracteriza por la presencia de prurito intenso (picor), sequedad extrema de la piel, eritema, exudación, formación de costras y descamación.
El agua de mar puede crear una película muy fina y flexible, sobre la piel, lo que evita la pérdida de agua. Proporciona elasticidad, alivia los síntomas y consigue suavizar la piel. Varios ensayos clínicos demuestran que el efecto antiinflamatorio del agua marina del Mar Muerto favorece la disminución de la irritación e inflamación de la piel.
Algas para la piel
Los recursos marinos existen en grandes cantidades y variedades. El mar no sólo proporciona beneficios a través del agua. Las algas y los barros también son importantes fuentes de beneficios.
Las algas constituyen gran parte de la flora marina y contienen proteínas, vitaminas, minerales y oligoelementos en concentraciones superiores a las del agua de mar. Bastantes especies de algas pueden utilizarse en productos hidratantes, antienvejecimiento y por sus propiedades antimicrobianas se contemplan como opción a los actuales conservantes.
La algoterapia es la utilización de algas para tratamientos terapéuticos y se pueden utilizar de dos maneras diferentes:
- Naturales (recubriendo parcial o totalmente el cuerpo).
- Liofilizadas, es decir, en polvo de alga fermentada que añadimos al agua del baño o como envolturas y emplastes o cremas de uso tópico.
Algas en cosmética
Se utilizan en forma de cremas, jabones, para prevenir estrías, estimular la síntesis de colágeno favoreciendo la regeneración de tejidos y la reducción de arrugas. También pueden usarse como cosméticos corporales hidratantes y anti celulíticos por su efecto drenante.
Fangos o barros
En este caso, otro componente derivado del agua de mar son los fangos o barros. De ahí deriva la fangoterapia, que es del uso terapéutico de fangos o barros, tanto aplicados de forma localizada o generalizada por todo el cuerpo.
Siempre se utiliza de forma externa y con objetivos cosméticos como tratamientos corporales reductores, tratamientos terapéuticos para problemas de piel como la psoriasis o incluso para tratar los dolores musculares o de huesos. Los barros o fangos más conocidos son los del Mar Muerto.
¡Disfruta de los beneficios del agua de mar en vacaciones!
Si tienes la suerte de vivir cerca del mar o si tienes la oportunidad de poder disfrutar algunos días de tus vacaciones en la costa, puedes aprovecharte de muchos beneficios descritos anteriormente.
Si padeces acné, te recomendamos los baños de mar sin dejar tu pauta habitual de higiene y tratamiento que tu especialista te haya prescrito.
Si tu problema es de piel con eczema, los baños de mar aliviarán mucho tus molestias.
Para personas con problemas de retención de líquidos y de mala circulación, lo ideal es dar paseos por la orilla de la playa y hacer ejercicios aeróbicos dentro del agua. Esto te ayudará a mantener a raya las molestias que el calor puede acentuar.
Si no te gusta la playa, pero quieres disfrutar de todos estos beneficios veraniegos, puedes optar por los tratamientos de barros y algas en tu centro de estética.
¡Y recuerda! Antes de exponerte al sol y a los rigores del verano, tu piel agradecerá una buena exfoliación a base de sales del Mar Muerto: una piel preparada es una piel sana.
